Según dijo la Policía a medios locales, un hombre tiró esta tarde pintura roja sobre el símbolo de gran tamaño delineado en color amarillo en la calzada de la Quinta Avenida, y la mancha se fue extendiendo a medida que pasaban vehículos hasta que las autoridades cerraron uno de los carriles para limpiarla.
El pasado jueves, el alcalde Bill de Blasio se unió a un grupo de jóvenes activistas para pintar el grafiti reivindicativo, uno de varios que se han realizado por toda la ciudad pero especialmente polémico por su ubicación a los pies del rascacielos de Trump, quien llegó a calificar el proyecto como un «símbolo de odio».
El céntrico enclave, en el que suele haber vendedores ambulantes de «souvenirs» de burla u oposición a Trump, se convirtió este fin de semana en escenario de enfrentamientos espontáneos entre simpatizantes del presidente y defensores de «las vidas negras importan», de acuerdo a medios locales, sin causar incidentes.
La Policía busca al responsable de tirar pintura roja sobre el letrero, supuestamente un hombre blanco que iba vestido con camiseta y gorro negros y que salió corriendo antes de que llegaran los agentes.
No es el único ni el primer incidente de este tipo que se registra, ya que han sido vandalizados otros grafitis de Black Lives Matter pintados por todo EE.UU. en medio del debate sobre la brutalidad policial y el racismo sistémico tras un mes de protestas por la muerte violenta del afroamericano George Floyd en Mineápolis.
En algunos de esos incidentes vandálicos, personas opuestas al movimiento antirracista han intentado modificar los lemas para que se le leyera «todas las vidas importan» o «las vidas blancas importan», lo que ha generado investigaciones y arrestos bajo cargos de crimen de odio.