Reino Unido pone en marcha un nuevo régimen de sanciones contra Moscú, Pyongyang y Riad

Reino Unido ya no solo podrá imponer sanciones a países que violen los derechos humanos, sino también a personas o entidades, y además, lo podrá hacer de forma independiente, sin necesidad de estar en línea con lo dictado por la Unión Europea, de la que dejará de forma parte completamente a partir de diciembre de este año, cuando acabe el período de transición del Brexit.

En un comunicado, el Gobierno de Boris Johnson explicó que la puesta en marcha del nuevo régimen de sanciones, denominado Reglamento Global de Sanciones de Derechos Humanos, «significa que Reino Unido tiene nuevos poderes para evitar que los involucrados en graves abusos y violaciones de los derechos humanos ingresen al país, canalicen dinero a través de los bancos del Reino Unido o se beneficien de nuestra economía», y «permitirá que Reino Unido trabaje de forma independiente, aunque con aliados como los Estados Unidos, Canadá, Australia y la Unión Europea».

Las primeras sanciones anunciadas son contra «25 ciudadanos rusos involucrados en la tortura y muerte del abogado Sergei Magnitsky, que descubrió la corrupción generalizada de un grupo de funcionarios fiscales y policiales rusos», reza el comunicado, así como contra «20 ciudadanos saudíes involucrados en la muerte del periodista Jamal Khashoggi». También están en la lista «dos generales militares de alto rango de Myanmar involucrados en la violencia sistemática y brutal contra el pueblo rohingya y otras minorías étnicas» y dos organizaciones «involucradas en el trabajo forzado, la tortura y el asesinato que tienen lugar en los gulags de Corea del Norte».

En una intervención este lunes en la Cámara de los Comunes, el ministro de Exteriores, Dominic Raab, manifestó que «este gobierno está absolutamente comprometido con que Reino Unido sea una fuerza aún más fuerte para el bien en el mundo» y en materia de derechos humanos «defenderemos la libertad de los medios, protegeremos la libertad religiosa y, con las medidas que estamos anunciando y promulgando hoy, haremos responsables a los autores de los peores abusos contra los derechos humanos».

Raab, que se felicitó de que «la idea de tomar medidas selectivas contra los violadores de los derechos humanos haya recibido un gran respaldo entre los partidos», explicó que el nuevo reglamento «nos permitirá imponer prohibiciones de viaje y congelamiento de activos». «Hoy este Gobierno y esta Cámara envían un mensaje muy claro en nombre del pueblo británico: que aquellos con sangre en sus manos, los matones de los déspotas o los secuaces de los dictadores, no serán libres de entrar al país para comprar propiedades en Kings Road, o hacer sus compras navideñas en Knightsbridge, o para desviar dinero sucio a través de bancos o instituciones financieras británicas».

El ministro dijo que 2también apoyamos enérgicamente los esfuerzos para poner en práctica un régimen de sanciones de derechos humanos de la UE», y ya que «en la práctica, las sanciones selectivas son más efectivas cuando están respaldadas por una acción coordinada y colectiva, trabajaremos en estrecha colaboración con nuestros socios de Five Eyes (la alianza de inteligencia que integrada por Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Reino Unido y Estados Unidos) en particular Estados Unidos y Canadá».