La conocida red de micromensajes, fundada en 2006, va a incorporar a lo largo de este año este formato entre sus funciones, aunque se va a bautizar como «Fleets». Por el momento, solo han trascendido algunos detalles. Mo Al Adham, jefe de producto de Twitter en Brasil, asegura en un comunicado, es que «Twitter es el lugar donde hablas sobre temas que te interesan», pero “algunas personas dicen que se sienten inseguras tuiteando porque los mensajes son públicos y permanentes». El motivo es evidente: «Queremos hacer posible que tenga conversaciones en la plataforma de nuevas maneras, con menos presión y más control».<blockquote class=»twitter-tweet»><p lang=»pt» dir=»ltr»>Às pessoas no Brasil: esperamos que vocês testem e gostem desta nova forma de expressão no Twitter. Estamos ansiosos para ouvir a opinião de vocês e entender como Fleets mudam sua experiência na plataforma. Podem me mandar DMs. <a href=»https://twitter.com/hashtag/FleetsFeedback?src=hash&ref_src=twsrc%5Etfw»>#FleetsFeedback</a></p>— Mo Aladham (@maladham) <a href=»https://twitter.com/maladham/status/1235272195196121088?ref_src=twsrc%5Etfw»>March 4, 2020</a></blockquote> <script async src=»https://platform.twitter.com/widgets.js» charset=»utf-8″></script>
Brasil va a ser el primer mercado en probar esta nueva apuesta de la empresa estadounidense, que gestiona más de 330 millones de cuentas en todo el mundo. «Twitter es el lugar donde hablas sobre temas que te interesan. Pero algunas personas dicen que se sienten inseguras para tuitear porque los tuits son públicos, permanentes», apunta. ¿Qué impacto tendrá? ¿Es buena idea o, por el contrario, va a provocar la pérdida de esencia de Twitter? Muchas preguntas todavía sin resolver. Muchas de las funciones introducidas por el servicio ha sido herencia de interacciones previamente utilizadas por sus usuarios. La comunidad inventó los «retuits», los «hashtag», los «hilos». Estas opciones, que ahora son tan habituales en la conversación, han alterado en parte la naturaleza de Twitter, aunque se había mantenido al margen de algunas modas.
Aunque muchos usuarios suelen eliminar sus «tuits» de manera automatizada o manual cada cierto tiempo -hay aplicaciones de terceros que permite programar esta acción-, uno de los secretos de la plataforma es haber servido de crónica de actualidad. Del tiempo real. Del momento en directo. Y sí, desde hace unos años se ha recurrido para hacer «tuit-hemeroteca», para confrontar opiniones pasadas con las del presente para airear las vergüenzas de muchos usuarios. En especial, de dirigentes políticos. Un «tuit» mal dado ha provocado despidos y críticas supremas. ¿Se acabará esto si se utiliza de manera masiva las «Stories»?
Por los detalles conocidos, estos «Fleets» tendrán la misma extensión que los «tuits», es decir, 280 caracteres. Permitirá a los usuarios compartir mensajes en texto, imágenes y vídeos. Con una salvedad: no podrán recibir «me gusta» o ser «retuiteados». No tendrá, por tanto, comentarios públicos. Funcionará a modo de comunicado, de envío masivo libre de interacciones. Y, con ello, útil para empresas y políticos. «compartir lo que está pensando con mayor comodidad», avanza. Menos positivo y transparente para el ciudadano, aunque de esta forma se podrán quitar de un plumazo ciertos usuarios «trolls» o maleducados que no respetan los códigos de conducta deseados. La prueba arrancará esta semana en Brasil y no se descarta que se extienda a otros países.