Se trata de los diputados Zandra Castillo, que está embarazada, Renzo Prieto y Angel Torres, que fueron detenidos por la FAES sin orden judicial y sin informar adónde los trasladaron, según confirmó la Presidencia de Guaidó.
Castillo y Torres fueron dejados en libertad tras unas horas de arresto, aunque confirmaron que el tercero de los legisladores detenidos, Renzo Prieto, sigue bajo custodia policial.
Así lo confirmó Torres en declaraciones a periodistas a las puertas del hotel de Caracas en el que se hospedaban para participar en una sesión de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) y al que fueron devueltos varias horas después de ser arrestados.
El diputado aseguró que estuvieron bajo la supervisión del director del FAES, «un señor de apellido Domínguez», en aparente referencia a José Miguel Domínguez Ramírez, responsable de ese grupo.
Prieto ya estuvo preso durante cuatro años, al igual que el también diputado Gilber Caro, ambos del partido Voluntad Popular, liderado por Leopoldo López. Caro también fue arrestado de nuevo el pasado 20 de diciembre y desde entonces permanece bajo detención.
A las FAES, también conocida como los «escuadrones de la muerte», le atribuyen más de 18.000 ajusticiamientos o asesinatos cometidos en los últimos tres años después de ser creada por Maduro para la seguridad y el control social de los barrios populares, según el Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV).