En la recta final del debate, el insecto se posó en la cabeza del vicepresidente de EE.UU., Mike Pence. La negritud de la mosca y el cabello blanco impoluto, sin rastro de su color original, hacían al visitante inevitable para los ojos del espectador.
El díptero se quedó sobre Pence durante dos minutos y, de forma inmediata, se comió toda la atención. En un debate sosegado, cívico, sin sobresaltos, la mosca ganó entidad propia como protagonista: en el escenario de Salt Lake City (Utah), estaban los candidatos, la moderada y ella.
Las redes sociales se llenaron de referencias al insecto, para que se crearon cuentas en Twitter y una infinidad de memes. El candidato demócrata, Joe Biden, no dejó pasar la ocasión y se fotografió en redes sociales con un matamoscas y con un juego de palabras sobre la mosca: «Danos cinco dólares y ayuda a que esta campaña vuele«. ‘Volar’ y ‘mosca’ se escriben en inglés de la misma forma: ‘fly’. Poco después, la web de Biden ponía a la venta en su web un matamoscas con la leyenda ‘Verdades frente a moscas’.<blockquote class=»twitter-tweet»><p lang=»en» dir=»ltr»>Pitch in $5 to help this campaign fly. <a href=»https://t.co/CqHAId0j8t»>https://t.co/CqHAId0j8t</a> <a href=»https://t.co/NbkPl0a8HV»>pic.twitter.com/NbkPl0a8HV</a></p>— Joe Biden (@JoeBiden) <a href=»https://twitter.com/JoeBiden/status/1314031047013732352?ref_src=twsrc%5Etfw»>October 8, 2020</a></blockquote>
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Nadie duda de que la mosca tendrá su espacio en los programas de comedia y los ‘late night’ hasta el final de la campaña. El furor por el bicho muestra que muchos estadounidenses, sobre todo tras la bronca y la agitación de los últimos días, están listos para tomarse la campaña electoral con algo de ligereza.