La
información falsa
sobre el virus ha estado corriendo como la pólvora por la red desde el comienzo de la epidemia. Si hace una búsqueda rápida en Google no le llevará demasiado tiempo encontrar teorías que apuntan a la sopa de murciélago o a un mercado de animales exóticos como causante. Tampoco hace falta esforzarse demasiado para encontrar remedios milagrosos. Desde homeopatía, hasta una supuesta solución mineral milagrosa.
Facebook emplea verificadores para dilucidar si la información que se sube a la plataforma es cierta. Recientemente, la red social decidió cambiar sus normas publicitarias de cara a las próximas elecciones de Estados Unidos.
Cabe recordar, además, que la OMS ya ha compartido varios consejos para prevenir el contagio. Entre estos se encuentra lavarse las manos frecuencia, toser con el codo flexionado, mantener una distancia prudencial con aquellas personas que estén enfermas, no tocar con las manos ojos o nariz, acudir al médico ante la presencia de cualquier síntoma o evitar comer carne cruda. Respecto a las mascarillas, que ya se han agotado en numerosas farmacias, la OMS solo recomienda su empleo en los casos en los que la persona tenga tos como medida de protección contra los demás. También se deben emplear si se va a atender a alguna persona que se encuentre enferma.