«Me complace anunciar que el congresista Mark Meadows se convertirá en jefe de Gabinete de la Casa Blanca. Hace mucho que conozco y trabajo con Mark, y nuestra relación es muy buena«, anunció Trump a través de Twitter.
El presidente agradeció a Mulvaney «haber servido tan bien a la Administración», y anunció que se convertirá en el enviado especial de Estados Unidos para Irlanda del Norte.
Trump no detalló los motivos del nombramiento de Meadows, que será su cuarto jefe de Gabinete en poco más de tres años tras Reince Priebus, John Kelly y el propio Mulvaney. Mulvaney, también un excongresista, asumió el puesto de jefe de Gabinete de forma interina tras la salida de Kelly hace más de un año.
Según medios estadounidenses, la relación entre Trump y Mulvaney se había deteriorado a raíz del proceso de juicio político que la oposición demócrata impulsó contra el presidente estadounidense a finales de 2019. Trump, sin embargo, optó por mantener a Mulvaney en el cargo para evitar sumir a la Casa Blanca en el caos en pleno juicio político.
Uno de los motivos que irritaron a Trump fue la admisión durante una rueda de prensa por parte de Mulvaney que el mandatario estadounidense había ordenado congelar un paquete de ayuda económico-militar para Ucrania, una de las bases en las que los demócratas edificaron su caso de «impeachment«.
Meadows, de 60 años, representa a Carolina del Norte en la Cámara Baja de Estados Unidos desde 2013 y es uno de los mayores aliados de Trump en el Congreso dentro del Partido Republicano.
Entre 2017 y 2019, Meadows presidió el Freedom Caucus, un grupo cercano ideologicamente al Tea Party que agrupa a una treintena de los congresistas republicanos considerados más conservadores y libertarios.
En nuevo jefe de Gabinete había anunciado su intención de dejar su escaño tras las próximas elecciones legislativas de noviembre, en las que no iba a concurrir. Meadows llega a la Casa Blanca en un momento clave para Trump, que dentro de ocho meses se enfrenta a su propia reelección.